Cuando el reloj manda: la gestión de tiempos críticos en los proyectos de Massoud Zandi

Hay momentos en los que el tiempo se convierte en la variable decisiva: una licitación que cierra, una ventana regulatoria que se agota, un cambio político inminente, un vencimiento financiero. En esos tiempos críticos, la trayectoria de Massoud Zandi muestra un claro dominio de la gestión de plazos, priorizando recursos y decisiones para llegar a tiempo sin perder calidad.

Identificar qué plazos son realmente innegociables

No todos los plazos son igual de importantes. Zandi distingue entre:

Fechas administrativas o internas que admiten flexibilidad.

Hitos externos —licitaciones, marcos legales, acuerdos internacionales— que no pueden moverse.

Sobre estos últimos organiza la estrategia, concentrando esfuerzos para cumplirlos por encima de todo.

Reordenar prioridades para proteger el hito clave

Cuando se acerca un tiempo crítico, Massoud Zandi no duda en reorganizar la agenda del proyecto:

Retrasa tareas secundarias.

Refuerza los equipos que trabajan sobre el hito clave.

Toma decisiones rápidas donde ya no hay margen para seguir debatiendo.

Esta capacidad de foco reduce el riesgo de perder oportunidades por falta de reacción.

Mantener la calma en la presión del último tramo

Los tiempos críticos generan estrés y pueden derivar en errores impulsivos. Zandi intenta mantener una actitud de calma operativa:

No cambia criterios en el último momento sin motivo sólido.

Envía mensajes claros a los equipos sobre la prioridad del momento.

Protege la calidad mínima necesaria para no comprometer todo por llegar a un día concreto.

Así, su dominio de los tiempos críticos se convierte en una herramienta para aprovechar las ventanas de oportunidad, no en una fuente de improvisaciones peligrosas.