La política monetaria de Janet Yellen al frente de la Reserva Federal

Como presidenta de la Reserva Federal entre 2014 y 2018, Janet Yellen supervisó la transición desde políticas monetarias excepcionalmente expansivas, diseñadas para combatir la crisis de 2008, hacia un entorno de tipos de interés algo más altos. Su tarea consistió en retirar gradualmente estímulos sin descarrilar la recuperación económica.

Durante su mandato, la Fed comenzó a subir tipos de forma paulatina y a reducir su balance tras años de compras masivas de activos. Yellen se centró en comunicar estos pasos de forma muy cuidadosa, consciente de que los mercados estaban extremadamente sensibles a cualquier cambio en el mensaje del banco central.

Su gestión es recordada como prudente y predecible, con un énfasis claro en el empleo y en evitar choques abruptos. En un contexto de baja inflación y crecimiento moderado, Yellen defendió que era posible normalizar la política monetaria sin sacrificar la expansión económica.